El Sector Estatal de Medios de Comunicación de FSC-CCOO quiere manifestar su total respaldo a la sección sindical estatal de CCOO de la Agencia EFE frente al ataque vertido contra este sindicato por el presidente de la Agencia EFE, Alex Grijelmo, quien –a pesar de ser el máximo responsable de un medio de comunicación- no respeta el ejercicio de la libertad de expresión por parte de los representantes de los trabajadores.
Un comunicado de la sección estatal de CCOO, en el que se denunciaba la opacidad que rodea a las retribuciones recibidas tanto por Grijelmo como por el centenar de directivos con el que cuenta la Agencia, fue entendido por el presidente de EFE como un “atentado contra su imagen y su honradez”, lo que le llevó a romper las incipientes negociaciones del convenio colectivo. Pero Grijelmo ha ido mucho más allá, al preguntarse públicamente cuánto cobran otros presidentes de empresas estatales o el secretario general de CCOO.
Además de suspender las negociaciones unilateralmente, Grijelmo difundió una nota entre la plantilla en la que acusaba a CCOO de “centrar sus preocupaciones en cuestiones que nada resolverían el riesgo actual de cualquier trabajador de perder su empleo”. Dicho riesgo ya es una realidad para la red de corresponsales y colaboradores nacionales de EFE, ya que con la excusa de “regularizar” la situación de cientos de estos trabajadores autónomos, la dirección de la Agencia está prescindiendo de muchos de ellos, en tanto que a otros no les queda más remedio que marcharse ya que el cambio de condiciones laborales y el drástico recorte de las tarifas les hace económicamente inviable su continuidad.
Para la Comisión Ejecutiva del Sector Estatal de Medios de Comunicación de FSC-CCOO es inadmisible que Grijelmo pretenda revertir hacia la parte social la responsabilidad de su decisión de romper la negociación del convenio colectivo acusando a CCOO de mala fe, deslealtad y escasa voluntad negociadora, y que insinúe malintencionadamente que a los representantes de este sindicato no les importa la posibilidad de que se destruya empleo en EFE, porque están cubiertos legalmente ante tal eventualidad. No parece extraño que esta cobertura legal le resulte excesiva a Grijelmo, teniendo en cuenta que la actual dirección de EFE tiene en su haber una sentencia en contra por vulnerar el derecho fundamental a la libertad sindical, además de otra por actuar “torticeramente y de mala fe” en la contratación de una trabajadora que fue despedida.
